Para ti, sí, para ti.

Me impacta tu falsedad
cuando sonríes, cuando miras,
cuando intentas parecer amable,
cuando ventilas tu quebrada serenidad.
Me impacta porque, quién mejor que yo
para penetrar en tu secreto,
en tu cabeza llena de pájaros,
en tu conciencia torcida
tanto o más que tu pasado.
¡Ay amigo! Envidio tanto tu frialdad ante la vida;
sobre todo porque la muestras cálida.
Y te digo “amigo” para que escuches
una sola palabra sincera en tu vida,
mas no te ofrezco garantía de plena autenticidad
porque sabes que mi palabra fue violentada por ti,
y para ti se forma de sentimiento y víscera.
Te digo “amigo” para que conozcas esta palabra.
Te digo “compañero” para que calmes tu soledad.
Te digo “hermano” para que algo en ti tenga sentido.
Te digo “tú” para que dejes el “nosotros” del aparentar.
¿Recuerdas aquello de la luna? ¡Qué ironía!.
Tienes el arte de cautivar, de envolver, de impactar.
Eres misterio, eres mentira; por eso.
Es difícil verte y no pensar, pensarte y no reír.
Porque en la vida se encuentran pocas personas como tú,
tan perseverantes y con tanto empeño.
Perseverantes en su falsedad
y en el empeño de compartirla disfrazada a los demás.
Amigo, compártela con este que escribe
si algún día los otros se cansan de ti,
si se cae tu máscara.
Solo recuerda que este que escribe,
conoce la paz que tanto añoras,
ve la luna sin necesidad de fábulas,
pero sobre todo te conoce a ti,
que te desarmabas ante esa paz,
que ensuciaste la luna con todo su misterio,
y que despreciaste un cariño así tan puro.
Ahora no sé si te desarmas, si te atemorizas.
Lo que sé, es que te esfuerzas en seguir despreciando
a aquel que soportando el desprecio,
se burla a carcajadas de ti.
(Escrita en 2007)
Comments